Concurso de cuentos: "La Vida no es un Cuento de Hadas".

Este cuento tiene dos Narradores, cada uno sera marcada al comienzo de su narración ejemplo - Mario - y ahí comenzara su narración, la cual sera terminada con el nombre del próximo narrador. Ej: - Camila –

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Estoy Bien:

- Maia -

Escucho los gritos de mi madre y los golpes de mi padre. Me intento refugiar en mi mundo, pero no puedo. Abrazo cada vez más a mi osito de felpa. ¿Estoy cada vez mas sola? no lo se, estoy demasiado asustada para pensarlo. Mi corazón palpita cada vez más rápido, mi sudor recorre mi pequeño cuerpo. me pregunto si mi madre esta bien, no lo se. Solo la escucho gritar y llorar, solo gritar y llorar, no se lo que sucede, no lo logro entender. Porque mi padre le hace esto a mi mama, ¿acaso no la quiere?, ¿no nos quiere?. El siempre me decía que me quería, que era su princesa, que siempre me protegería y amaría, nos protegería y amaría y ahora golpea a mi madre. Necesito escapar de aquí con mi madre, necesito que no la lastime, ella es una mujer buena y no lastimaría ni a una mosca y yo me pregunto ¿por qué lo hace? ¿por que la golpea?. De repente siento un grito ahogado de mi madre, que proviene de afuera de la habitación, seguido de un golpe en seco. Bajo corriendo a ver a mi madre, efectivamente ella no se encontraba bien. La sangre recorría parte de la habitación, su sangre, y no podía hacer nada. Mi padre me miro con una mirada fría, que no expresaba ningún sentimiento, ni rencor. Saco algo de su bolsillo, de aspecto negro y algo brillante. Ciertamente era un arma, volvió a mirarme con esa mirada que me causaba escalofríos y temor. Me iba a matar, ¿porque? ¿le he hecho algo?, no lo sabia, solo logre cerrar mis ojos. Cuando un disparo broto del arma, haciendo que dé un salto del susto, abrí los ojos, buscando una respuesta, ¿sigo viva? ¿estoy agonizando?, solo me encuentro con que el disparo no iba dirigido a mi, sino a él. Había quedado huérfana, tendría que vivir el resto de mi vida sin padres, mejor dicho sin madre. Porque para mi, mi padre había muerto cuando apenas tenía 4, cuando todo esto empezó y aquí estoy con 10 años y huérfana.

8 años después :

- ¡Maia! - Grita mi madre desde abajo.

Genial, hoy comienzo la Universidad Veterinaria, en Los Ángeles y mi madre parece estar más emocionada que yo. Aunque debo admitirlo, ir a un lugar distinto de donde eh vivido casi 8 años entristece. Ya tengo mis maletas armadas Steph mi única mejor amiga desde que he llegado aquí luego de que una hermosa pareja me adoptara, hemos sido inseparables. Nos contamos todo y para mejorar vamos juntas a la universidad. Me baño, me coloco mi buzo purpura, un jean y mis converse haciendo juego con mi buzo y estoy lista. Tomo mis maletas y me digno a bajar a tomar el desayuno con mi familia. El instituto no queda tan lejos de mi casa, así que me sera más corto el viaje de ida y de regreso, para visitarlos mas seguido.

El instituto es mas grande de lo que pensaba, Steph me mira y corremos a nuestras habitaciones. Si nos toco juntas, al menos no voy a tener que compartir la habitación con una desconocida que seguramente no me caiga bien. Mi primera clase es con la señorita, mas bien la señora Young. Luego el almuerzo.

- Zedd -

Al entrar a la cafetera veo a una hermosa chica pelirroja de ojos turquesa. Con solo mirar su sonrisa ilumina la cafetera. Me les acerco para entablar una conversación con ellas. 

- Hola - digo.

- Hola - respondieron al unisono.

- Se leen la mente o que - dije y rieron - soy Zedd por cierto -

- Soy Steph y ella es Maia - Dijo la rubia, seguramente es la amiga de Maia.

- O que bello nombre tienes - Dije refiriéndome a Maia, la cual se ruborizo.

- Oye más lento Romeo - Bromeo Steph.

Esta chica me cae cada vez mejor, aunque no parezca soy buen chico y no tengo segundas intenciones, por así decirlo. Ella es demasiado bella para que la lastimen como lo hicieron conmigo. Se que podría parecer carpero pero no lo soy, solo me emociona sentir algo que no siento desde hace mucho y solo quiero llevar la iniciativa, para que no sea tan fácil lastimarme. 

- Maia -

- Este chico Zedd parece buena gente -dijo mi madre después de que le contara de mi "gran día" por teléfono- Me encantaría que me lo presentes, tal vez deberías traerlo a casa -

- Mamá recién lo conocí -dije - y no voy a llevarlo a casa aún - 

- Okay cuando te sientas lista tráenos a tu "novio" a casa - dijo, e increíblemente esboce una sonrisa. 

- No es mi novio - dije

- Okay, okay, me rindo - dijo, oigo sonar el timbre y al parecer abre la puerta por mientras jugueteo con un bolígrafo. - después te llamo - dijo con voz preocupada y temerosa.

- Mamá - grito al teléfono - Estas bien que pasa - las lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos y en eso llamo a mi padre y no contesta.

Decido ir a buscar a Steph, en el camino me encuentro a Zedd.

- ¿Que te pasa? - dice preocupado

- Necesito ir a casa urgente - digo largándome a llorar - a mi madre le pasa algo y no quiero perderla devuelta, no quiero quedar sola de nuevo - sollozo 

- Vamos para allá, yo te llevo - dijo

Al llegar a la casa de mis padres escucho gritos y Zedd no me dejo entrar sola. al entra mi madre le gritaba un señor al notar quien era no tuve miedo de llorar, solo porque se me partió el corazón. Intento acercarse y yo alejarme pero mis piernas no reaccionaban, Zedd se puso delante de mi protegiéndome. Yo solo no entendía que hacia aquí yo pensaba que estaba muerto.

- ¿quien eres? - dijo Zedd

- Soy su padre - dijo haciendo referencia a mi, Zedd solo se limito a mirarme.

- No es cierto él murió para mi cuando yo tenia 4 años el día en que empezó a golpear a mi madre - dije con la voz entrecortada - para mi no tengo padre él murió antes que mi madre -

Se me acerco y me toco la cara, solo me limite a moverme y subir a mi cuarto. Tome las navajas de mi cajón, las que no veía desde que tenia 10 años. Zedd toco mi puerta y decidí abrirle y dejarlo pasar, necesitaba a alguien. Al ver lo que tenia en la mano intento sacármelo, no se lo impedí. Al sacarme la navaja de mi mano me abrazo para que llorara, lo cual hice, fue la primera vez que no me sentía tan sola. Nos dirigimos a la cama y nos sentamos al borde para poder hablar mejor.

- ¿Quieres hablar de esto? - dijo con una dulzura única.

- No quiero molestarte - dije

- No me molestas, es más me encanta pasar tiempo contigo - dijo - ¿El es tu padre?

- Si, desgraciadamente lo es. - dije, al ver que su mirada bajo repuse - ¿te pasa algo?

-Zedd-

- Mi padre murió en un accidente cuando tenia 7 años y mi madre murió de cáncer hace dos años - dije conteniendo las lagrimas - ahora vivo con mis abuelos. Mi abuela cocina de maravilla. - agregue y ella sonrío. Pero no duro mucho su sonrisa. 

- Mi padre comenzó a pegarle a mi madre cuando yo tenia 4 años, cada noche me escondía en mi habitación y rezaba para que mi madre estuviera bien. Ella me lo había pedido con tanta dulzura, que no podía decirle que no. A los 10, mi padre termino de matarla, porque ella cada día moría un poco más. La razón por la que seguía viva era porque me amaba. - Dijo respirando hondo para que no le saliera un lagrimón, como el que rodaba por su mejilla - Al bajar, su sangre recorría la habitación y mi padre decidió suicidarse. Ese fue el momento que me sentí tan sola, en el momento en el que supe que no tenia mas familia. Mi abuelos no me aceptaron porque decían que era culpa de mi madre y mía que mi padre muriera y por parte de mi madre no tenia. En el orfanato conocí a muchas chicas unas de ellas me enseñaron a cortarme para liberar mis emociones, se sentía bien que la sangre cayera por mis muñecas. Querían que entrara en la anorexia y bulimia, pero me negué. Un día una hermosa pareja me adopto y me llevaron a vivir a su enorme casa. Conocí a Steph, desde entonces somos inseparables y deje de cortarme. A los 16 me entere que mi padre seguía vivo y que quería contactarse con migo pero no lo deje. Hoy él esta acá. - 

Esta chica tiene un pasado doloroso mas de lo que es el mio. 

- El día en que te conocí volví a sentir lo que sentía por Jerife - dije

- ¿jerife? - dijo algo confundida

- Si Jerife una de mis tantas novias. - dije y ella mostró una sonrisa - Parecía ser mi único y verdadero amor y me lastimo. Solo era un juego para ella, una broma. El chico nerd al que todos podían lastimar - dije llorando. Era la primera vez que llore frente a una chica.

- No eres un nerd, yo pienso que eres lindo y sexy. - cuando dijo eso una sonrisa ilumino mi cara y ella se avergonzó tanto que intento correr hacia el baño. 

Luego la tome del brazo y la voltee para que quedáramos cara a cara. Ella estaba tan cerca mio que podía sentir sus latidos al momento que nuestras lenguas se cruzaron. Parecía que nuestras bocas estuvieran hechas una para la otra y la forma en que se sincronizan nuestros labios  era perfecta. Su sabor era tan dulce que hacia amarga la miel, era algo me hacia despegar los pies de la tierra. Al dejar de besarnos ella me miro confundida.

- No puedo hacerlo - dije - tengo miedo -

- Yo también - dijo - pero siento algo por ti -

1 mes después.

- Maia -

No puedo creer que sea mi primer cita con Zedd, estoy muy emocionada. Me puse unos tacos color crema que fuimos a comprar con mi madre y Steph, un vestido crema con flores y un bonito cinturón grueso, una tolerita del color del cinturón. Decidí dejar mi pelo largo y rojo suelto y un poco de maquillaje para que resalte mis ojos turquesa. Al sentir que toca el timbre bajo y atiendo. 

- Hola preciosa - dijo.

-Hola - sonreí un poco avergonzada.

- ¿Vamos? - pregunto

- Si - respondí.

Al entrar al restauran nos dijeron que no teníamos reservación y aquí estamos, en mi habitación de campus, con Steph y su novio jase, comiendo pizza y riéndonos. Después de que Zedd se disculpara 100 veces antes de irse le di un beso en la mejilla.

- Fue la mejor cita que he tenido - dije.

Se puso colorado - Para mi también -

5 años después.

- Zedd -

Ya llevamos 3 años de novios y hoy es la graduación ella y yo nos recibimos de veterinarios y cumplimos casi 5 Años de novios. 

Luego de la graduación decidimos ir a acampar al día siguiente. 

- Maia - 

Este campamento fue una de las mejores cosas que me han sucedido, como conocer a mi verdadera madre, a mis padres adoptivos, a Steph y a mi novio Zedd. A pesar de todo seguí luchando y estoy muy orgullosa de haberlo hecho, haber conocido personas maravillosas que se cruzan en nuestra vida por una razón, y a los obstáculos también, porque solo están en nuestro camino para que los superemos y si caemos en el intento, nos levantemos. Porque detrás de las nubes grises se oculta un sol brillante.

La vida no es un cuento de hadas, pero al final encuentras el camino hacia la felicidad.

FIN.